El Pleno del Consejo General de la Abogacía Española aprobó el viernes un comunicado en el que “rechaza por unanimidad cualquier posible intervención de las comunicaciones de los abogados y abogadas en el ejercicio de su profesión, como salvaguarda del derecho fundamental de defensa, y manifiesta su preocupación ante la información aparecida en diversos medios de comunicación, por si la presunta utilización de medios tecnológicos pudiera haber afectado al derecho y deber del secreto profesional”.